Marcianos y Venusianas IX

ELLA.- Me peino y ya estoy.

ÉL.- ¿Cuánto tiempo es eso?

ELLA.- 10 minutos.

Fueron 43...

Brad Pitt

¿Soy el único friki chiflado que piensa que Brad Pitt ya tendría algún Oscar y demás premios varios si fuese feo?

Hoy es San Timoteo

Radiohead - All I need

Hace mucho que no rendía homenaje a las grandes canciones de mi humilde discoteca personal:

Calavera con broche rubio parlante da rueda de prensa

A día de hoy, tras la decisión de acelerar las reformas económicas del gobierno, una calavera en tono jade oscuro brillante, con un rocambolesco broche en la solapa en forma de Elena Salgado, ha comparecido en la sala de prensa del Ministerio de Economía para explicar las últimas medidas a tomar por los bancos y cajas de ahorro españolas para afrontar la inminente auditoría de liquidez encargada por el Banco Central Europeo. A decir del PP, esto sólo ha venido a demostrar que los masones controlan el país. Tan sólo la esposa del director de El Mundo se ha atrevido a alabar el buen gusto de la calavera, mientras el Secretario de Estado de Finanzas, sito en la mesa conferenciante, ha tenido que ser atendido por el Samur de un ataque de vergüenza ajena. Las últimas informaciones apuntan a que tan sólo se le mantendrá 48 horas en observación, tras lo cual se le permitirá regresar a su domicilio con un ligero tratamiento de Diazepam.

La penúltima frontera

Siempre se dijo que el terrorismo fundamentalista (venga de una cueva en Afganistán o de una casita de madera en Arizona) es el más dañino, porque les basta con planear la primera mitad. La segunda, la huída, es totalmente prescindible. Para qué, si con ello se ganan un paraíso con 40 vírgenes o mandar a tomar por el culo al banco que les tiene embargada la casa.

Siempre recordaré el 11-S, pero no porque yo dijese "este va a ser un día importante, voy a recordar dónde estaba y qué hacía para poder contarlo cuando sea mayor en alguna efeméride de España Directo" y tal... no. Lo recuerdo perfectamente porque aquel día pasé miedo de verdad. Es como me imaginaba yo que sería el día en que los marcianos vendrían con su rayo calórico a arrasar nuestra civilización. Algo así, esa sensación de que las cosas se ponen serias y no bastará con taparse bien con las sábanas esa noche.

Acabo de enterarme del atentado suicida del aeropuerto de Moscú. No digo que mi sensación sea la misma del 11-S, pero sí me han venido a la cabeza cantidad y cantidad de situaciones vividas. Un suicida se pone en la zona de llegadas internacionales del aeropuerto y se autoexcluye de la evolución humana, pero llevándose con él multitud de vidas inocentes. Desde que vivo en Madrid he ido infinidad de veces al aeropuerto, a llevar amigos y familiares, a esperarlos... Es uno de los lugares del mundo donde se puede ver más amor incondicional a cualquier hora, cualquier día, sin cortapisas ni convenciones. A mí me gusta ir a los aeropuertos, aunque sólo sea por eso. He visto abrazos, besos, lloros, risas. A mí también me ha pasado todo eso, por muy de duro que vaya por la vida. Me encanta viajar a cualquier país, que se abran las puertas y ver al otro lado una cara que de repente te reconoce y sonríe hasta más no poder. Una persona que después te abraza, te lleva a su casa y te da cama y comida. Eso es la bondad humana por definición, creo yo, hacer que otro se sienta reconfortado y querido.

Pues bien, resulta que ahora corremos el riesgo de que alguien entre a sus anchas en la sala de un aeropuerto, como felízmente hacíamos todos hasta ahora, y en vez de esperar impacientemente la llegada de alguien a quien hace años que no ve, con un globo, un regalo empaquetado con lazo, un ramo de flores o un simple abrazo de bienvenida, se traiga un chaleco de explosivos y te lleve por delante. Si de verdad tuviera un par de cojones, se iría a hacerlo al despacho de Putin, o de Obama, o del pelele que presida su país, o a casa de su puta madre, pero estas cosas siempre han sido de cobardes y, lamentablemente, lo seguirán siendo.

"Están locos", dirá alguien. No, los locos, si son locos de verdad, se dedican a pillarse los huevos con la puerta de un armario o a chupar candados. Pero si te dedicas a joder a los demás, eres un malnacido.

MTV (Morralla Televisión)

¿Alguien se acuerda de cuando la MTV ponía música?... Me estoy haciendo muy viejo.

Buenas noticias

Es viernes y no tengo gasolina en el coche. Va a ser un gran fin de semana...

Mi historia contigo

Todavía recuerdo aquella tarde de Junio:

Tus ojos negros y tu ceño fruncido,

esperando de mis labios las tres palabras que tanto ansiabas

y hasta ayer me arrepentía de no haberte dicho.

Pero ahora estoy aquí,

a la sombra de este sauce,

en la orilla de este río.

Veo las nubes pasar,

la brisa me sopla el flequillo

y los peces me preguntan

si echo de menos tu calor…

“Mmm… sí, mas tampoco siento frío”.

La nueva Lisbeth Salander

Ronney Mara: te advierto de que Noomi Rapace ha dejado el listón muy muy alto. Te espero con impaciencia, a ver si te mereces entrar en mi exclusiva lista de novias imaginarias o no.

Rooney

Noomi

Apocalipsis

A raíz del estreno en la Sexta de "The walking dead", entretenida pero tirando a mala y con errores de bulto que no dejan de darle cierto aire de serie B de los 50, me puse a repasar mentalmente todas las películas hechas hasta hoy día a cuenta de un futuro terrible y apocalíptico, causado por una guerra nuclear, una epidemia mortal, la caída de un meteorito, una invasión alienígena o por la explosión del ego de Mourinho (yo personalmente, pienso que será simplemente una especie de saqueo a nivel mundial provocado por la ambición desmedida y la injusticia social). Sin duda creo que la más verosímil es The Road (La Carretera). Está protagonizada por unos tremendos Viggo Mortensen y Charlize Theron junto a un chaval llamado Kodi Smit-McPhee, que a saber de dónde lo han sacado, pero que hace uno de los papeles de niño más acojonantes que he visto en mi vida. Totalmente recomendable... y descorazonadora también.

Soy un electroduende...

... y nadie me comprende.

White Lies

De vez en cuando me paso por casa de mi amigo/hermano Alex. Allí suelo hacer, gracias a su amplia cultura musical, descubrimientos que a la larga acaban convirtiéndose en imprescindibles de mi discoteca particular, lo cual muchas veces implica entrar a formar parte de la banda sonora de toda una vida. En su sala de estar escuché por primera vez maravillas como Mogwai o el "Felt Mountain" de Goldfrapp, sin ir más lejos. Pues en estas últimas navidades, entre 7 u 8 discos que me pasó, está uno que de momento lleva muy buen camino y al que me he enganchado un tanto los tres últimos días: "To lose my life" de White Lies. Tiene un par de canciones como la que da título al album o "E.S.T." (muy ochentera, genial) que llevan camino de convertirse en clásicos. Un grupo a seguir.

Hoy es el día de San Simeón Estilita

El cual, desde lo alto de su columna, sin duda gozaba de grandes vistas...