martes, 27 de febrero de 2007

Tendencias primavera 2007

Hace unos días que no subo nada. Por un lado, me falta un montón de tiempo y, por otro, me falta un montón de cerebro. De hecho, yo creo que el tiempo me roba el cerebro y ambos huyen al galope sin que yo pueda dar un paso tras ellos. Bueno, la cosa es que hoy, en un alarde de ombliguismo y de publicicutrerío televisivo, voy a daros mis recomendaciones para este mes de Marzo que vamos a comenzar. No, tranquilos, no voy a intentar conduciros por el camino recto de la castidad y el amor a Dios. Tampoco quiero venderos nada. No, sólo me gustaría que alguno disfrute de ello como yo no pude hacerlo estas últimas semanas: tranquilamente.


PELIS

Goodfellas (Uno de los nuestros)


El recientemente oscarizado Scorsese en uno de sus grandes trabajos. Una película que engancha por su crudeza desde la violentísima escena inicial, con un ritmo envidiable y unos actores en estado de gracia: un De Niro magnífico, Joe Pesci sublime hasta lo insultante y el intermitente Ray Liotta en el papel de su vida. Para ver un sábado por la noche con un buen whiskey.

Big Fish



No había podido ver esta película hasta que el mes pasado me la trajeron los Reyes desde el Lejano Oriente. Me habían hablado muy bien de ella, pero verla por mí mismo superó todas las expectativas. Quedé maravillado. Por un lado, me convenció definitivamente de la maestría de Tim Burton como cuentacuentos y de que “El planeta de los simios” no le pertenece… Por otro lado, me pareció de un optimismo y una sutileza pocas veces alcanzada. Y, además, Ewan McGregor es un tío que me cae bien. Totalmente recomendable, salvo que tengáis el día tonto: corréis peligro de llorar como Magdalenas.

El Dorado

Me da igual que sea un autoplagio de Howard Hawks (sobre “Río Bravo”). Me da igual que mi familia la tache de antigua. Me da igual que John Wayne fuese un facha. Vería esta película mil y una veces. El sábado por la tarde, el saloon es suyo.


LIBROS
La verdad sobre el caso Savolta



Lo que sí me gusta de los libros es que nunca jamás pierden su frescura. Ésta novela del extraordinario Eduardo Mendoza, tiene más de 30 años. Hace 12 que la leí por primera vez. Y aún hoy, en una nueva relectura, paso las páginas con avidez y me tiene de nuevo enganchado como a una quinceañera enamoradiza. La fluidez de la prosa es tan natural que no podemos ver lo difícil que es conseguir algo así para un escritor. Y tanto los pasajes serios como los cómicos se acoplan perfectamente a una trama elaboradísima y de una cotidianeidad (a pesar de su carácter histórico) que te atrapa de principio a fin. Una de las mejores novelas que he leído en mi vida.

El fantasma de Canterville



Oscar Wilde fue genio y figura hasta la tumba (en el cementerio de Père Lachaise, en París, declarada monumento nacional). Por el camino nos dejó inequívocas muestras de su talento, tanto en lo sensible y profundo como en lo aparentemente trivial y humorístico. Y doy fe de que leyendo esta novela ligera y agradable llegué a reírme a mandíbula batiente, cosa que siempre parece difícil con un libro. Para los que no se quieran devanar los sesos, se lee rápido y fácil. Y se lo pasa uno muy bien, os lo aseguro.

El cazador de Recompensas – Lucky Luke


No sólo de novelas vive el hombre. Me encanta leer cómics de los que ya devoraba en la infancia. Sin embargo, mientras unos pierden frescura con los años y se llenan de inocencia infantil, otros siguen redescubriéndose a sí mismos en cada lectura, me revelan nuevos recovecos que antes, de más pequeño, se me escapaban. Son como pequeños regalos que se esconden a la espera de que estés lo suficientemente preparado para descubrirlos. Y eso me pasa con Astérix y con Lucky Luke (ojo, siempre con guión de Goscinny, años luz por delante de obras posteriores con otros guionistas). Entre los de Lucky Luke, leí últimamente “El cazador de recompensas”. Se los lee uno en apenas una hora, pero su sabor a infancia retomada dura infinitamente más.


MÚSICA
Faithless – Bombs


Últimamente estoy un poco perdido respecto a nuevos discos, etc. Ya se sabe, el poco tiempo y el menos dinero. Pero voy a recomendaros tres canciones que últimamente escucho mucho y pueden ser un ejemplo de lo que se lleva hoy día en mi habitación, centro neurálgico de la escena musical en mi casa.
Faithless tiene nuevo disco desde Noviembre y su single, Bombs, deja de nuevo el sabor fresco y melancólico, a la vez, de todos sus discos. Me encantan estos chicos.



Iván Ferreiro – Días azules


De su último disco, el ex de Piratas se despide del oyente con esta pequeña joya, en la que demuestra toda esa fuerza interior que arrastra su música. A mí, me pone los pelos de punta. Bellísima.

White Stripes – Hello, operator



Un descubrimiento demasiado tardío para mí, allá por el 2004. Después del éxito de Elephant, redescubrimos sus antiguos álbumes, todo energía y rock’n’roll condensados en sólo dos instrumentos y una voz. Para que veamos que con guitarra y batería no sólo se hacen baladas de hoguera playera. Y para mí, siempre se quedarán ligados a un estupendo día de primavera en Suecia, haciendo una deconstructivista tarta de frutas del bosque con mi amigo Jonas entre trago y trago de Heineken. Aquellos eran buenos tiempos…



ARTE

Y para finalizar, recordando lo que un día fue para mí media vida, tres obras de arte colosales al margen de su tamaño. Tres artistas que supieron plasmar su época en obras que llegan hasta nosotros frescas y llenas de contenido, como el primer día. Aquellos que tengan la gran suerte de poder pasarse esta primavera (o siempre) por París, Roma y Nápoles podrán disfrutarlas en directo y llenar sus almas con un poquito de humanidad bien entendida, de buen gusto… de arte, al fin y al cabo.

Camille Pissarro – La parada de postas en Louveciennes


Musée d’Orsay, París

Policleto – Doríforo


Museo Arqueológico, Nápoles (copia romana en mármol de un original griego en bronce)

Borromini - San Carlo alle Quattro Fontane

Cruce de las vias delle Quattro Fontane, XX Settembre y Quirinale, Roma
Que lo disfrutéis, chavales.

No hay comentarios: