Entre Luca Toni y Julio Salinas sólo hay tres letras de diferencia: g-o-l. Me duele reconocerlo, porque Salinas es un tío que me cae muy bien, desde siempre. Pero si en vez de tenerle a él en el mundial del 94, hubiésemos tenido a un Luca Toni (también alto, desgarbado y con pinta de torpe), igual estábamos luciendo una estrella sobre el escudo.
Y gracias al Getafe y a toda su afición por la lección de fútbol de ayer. Un abrazo.
1 comentario:
I agree with you about these. Well someday Ill create a blog to compete you! lolz.
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